La menstruación es solo una de las cuatro fases del ciclo menstrual. Erróneamente, tendemos a centrarnos en ella y olvidar las demás, cuando cada etapa es importante. Según el día en el que estemos de nuestro ciclo, el cuerpo segrega una mayor cantidad de algunas hormonas y reduce otras. Es por ello que se producen cambios físicos en nosotras (¿te suena la temperatura basal?), que podemos favorecer o contrarrestar recurriendo a algunas plantas medicinales.

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Las fases del ciclo menstrual

A modo de resumen, esta es la duración de las diferentes etapas del ciclo menstrual:

1. Menstruación. A partir del día 1 de nuestra menstruación empezamos a contar el ciclo. Va desde el día 1 al día 5 o el último día de sangrado.

1. Fase preovulatoria o folicular. Desde el día 6 al 12. Es decir, desde que termina la menstruación hasta la ovulación.

1. Ovulación. Aproximadamente, se sitúa entre el día 13 y el 16 de tu ciclo. En ella se libera el óvulo del ovario, cosa que sucede entre 24 y 48 horas.

1. Fase lútea o premenstrual. Comprende desde el día 17 de tu ciclo hasta el primero de la menstruación

¿Qué plantas medicinales son más convenientes en cada etapa?

Fase 1 – Menstruación

En este momento, el endometrio se desprende y se produce el sangrado. Aumentan los niveles de FSH (hormona folículoestimulante) mientras que los de estrógeno y progesterona son bajos. Probablemente, las contracciones de nuestro útero nos causarán algunas molestias y también seremos más propensas al ardor, las digestiones difíciles y los dolores de cabeza.

No hay mucho misterio: durante la menstruación necesitamos plantas con propiedades antiinflamatorias, analgésicas, relajantes y digestivas.

• Milenrama. Destaca por contribuir al alivio de problemas estomacales y gástricos en general. Se toma en infusión, por la mañana y por la noche.

• Valeriana. Famosa por “ayudar a dormir”, aunque su tarea en realidad es relajar. Puedes tomar la cocción de su raíz o en tintura madre, aunque también la encontrarás en forma de comprimidos en tu herbolario o farmacia.

• Árnica. Esta planta, de aroma similar a la manzanilla, es conocida como el analgésico natural por excelencia y te ayudará con los dolores musculares o cefaleas. Su uso debe ser externo: en forma de infusión o tintura que aplicaremos en la zona, o bien adquiriendo pomadas que ya la integran como uno de sus componentes.

• Ortiga. Además de ser depurativa, también se toma en infusión para combatir la fatiga. Y un punto extra: es rica en hierro.

• Jengibre. Aunque puede tomarse en infusión, es más fácil y nutritivo consumirlo fresco. De él se asegura que reduce los calambres por ser antiinflamatorio, mejora la digestión y disminuye mareos o náuseas.

Fase 2 – Fase folicular o preovulatoria

En estos días, tu cuerpo se prepara para la ovulación, aumentando los niveles de hormona luteinizante (LH o HL) y la hormona estimulante del folículo (FSH). En los últimos días de esta fase, también se incrementa la liberación de estrógenos. La temperatura de tu cuerpo es ligeramente inferior a lo habitual.

Lo habitual en esta etapa es contar con todas nuestras energías, así que no necesitamos mucha ayuda, pero queremos recomendarte una planta que puede ayudarte a equilibrar tu cuerpo tras la pérdida de sangre de la menstruación: el diente de león.

Puede consumir sus hojas crudas en ensaladas o licuadas en forma de zumo. También puedes tomar infusiones de su raíz.

Fase 3 – Ovulación

El óvulo se desprende del ovario en relativamente poco tiempo y, aunque la fase ovulatoria puede llevar más de un día, “la cima” de la fertilidad se sitúa en el día 14 en un ciclo menstrual de 28 días. Aquí nuestros estrógenos han llegado al punto máximo.

Si estás buscando aprovechar este momento, solo podemos recomendarte especias como la canela y el clavo de olor, a las que se les atribuye el mérito de potenciar el deseo sexual, aunque podrían no ser necesarias porque esta fase se caracteriza por un aumento de la libido de forma natural. De cualquier modo, ¡te deseamos mucha suerte!

Algunas mujeres pueden sentir pinchazos o calambres durante el desprendimiento del óvulo. En ese caso, puedes recurrir a plantas con propiedades analgésicas o antiinflamatorias como la árnica (de uso tópico) o la cúrcuma. Esta última debe consumirse en comprimidos, ya que la cantidad que podemos agregar en la cocina es más bien escasa. Además, tiene un montón de beneficios añadidos que la convierten en un auténtico “multiusos” para la salud.

Fase 4 – Fase lútea o premenstrual

Tu cuerpo formará grandes cantidades de progesterona para engrosar las paredes del endometrio y utilizará, entre otras cosas, colesterol. La temperatura corporal aumentará. Todo esto consume energía y su aporte debe ser acorde a las necesidades de esta etapa.

Asimismo, en estos momentos suele aparecer el SPM (Síndrome premenstrual) que, en mayor o menor medida, afecta a la mayoría de mujeres.

Las plantas medicinales apropiadas para el síndrome premenstrual son:

• Onagra. El aceite de onagra posee un alto contenido en ácidos grasos Omega 6 (poco abundante en la dieta), que tienen propiedades antiinflamatorias.

• Jengibre. Otro antiinflamatorio del que te hemos hablado en la fase 1.

• Raíz de regaliz. Además de aliviar molestias gástricas, sus infusiones son deliciosas.

• Artemisa. Puede actuar como analgésico natural ante dolores leves, tanto de cabeza como musculares. Se puede tomar en infusión o en tintura.

• Azafrán. Varios estudios respaldan que el azafrán disminuye la cantidad de cortisol, que es el causante del estrés y la ansiedad. También es conocido como un antidepresivo natural. No se nos ocurre una mejor forma de tomarlo que incorporándolo a una paella, pero también puedes encontrarlo en herbolarios en forma de extracto.

¿Conoces alguna planta medicinal beneficiosa para el ciclo menstrual que no hayamos mencionado? ¡Cuéntanos tus hallazgos en los comentarios!